Si hay algo que no puede faltar en cualquier celebración son las tartas, no hay cumpleaños sin tarta ni velas y boda sin el típico muñeco de enamorados, siempre acompañado de un delicioso pastel para que nuestros familiares y amigos puedan disfrutarlo. Si nos remontamos a sus orígenes… para ellos no eran tan importantes estas celebraciones como las que les dedicaban a sus antiguos dioses.
Aunque en la actualidad es normal celebrar el nacimiento de nuestros allegados, no siempre ha sido así, los egipcios, por ejemplo, celebraban solo el nacimiento de los faraones, ya que en esta sociedad únicamente celebraban el nacimiento de los varones, ya que solamente estos se registraban, aunque también se tiene constancia de que la reina Cleopatra VII también celebraba sus cumpleaños.
Los orígenes en la celebración de cumpleaños con tartas nos llevan a Grecia, ellos creían que un espíritu protector seguía acompañándolos el resto de su vida, estos espíritus estaban directamente relacionado con los dioses que se asociaban al día concreto del nacimiento. En la antigua Grecia celebraban el cumpleaños de Artemisa el sexto día de cada mes, la diosa soberana de la luna, la virginidad, la caza y animales, también hermana del dios Apolo.
Cada 27 de enero se celebra el día mundial de la tarta de chocolate, una receta que se remonta a 1828, cuando un químico holandés consiguió extraer la grasa de licor del cacao para conformar los inicios del chocolate tal y como lo conocemos hoy en día.
En la actualidad existen una gran variedad de tartas, algunas más ricas en hidratos de carbono otras más saludables, unas más sabrosas y otras menos, unas para diabéticos, otras que se pueden incluir en una dieta saludable etc., con esto podemos romper ciertos estereotipos y decir que es un producto que se puede incluir a diario en nuestra dieta siempre que vaya acompañada de la correspondiente actividad física.